¿Tiene futuro mi proyecto empresarial?
No es una pregunta baladí, ya que todos los emprendedores hemos pasado alguna vez por esa fase en la que dudamos de todo y sólo encontramos obstáculos. En nuestra organización, en nuestros recursos e incluso en nuestra propia idea.
Es normal pensar, eso sí lo más de vez en cuando posible, que nuestro proyecto no va triunfar y que estamos condenados al fracaso más rotundo. Lo que no podemos permitir es que ese pensamiento, por muy natural que sea, nos quite un solo gramo de energía, ya que la necesitaremos para seguir hacia adelanta.
Cada vez es más difícil encontrar inversores que nos abran la puerta y que quieran escuchar nuestras ideas. Nuestras dudas serán las suyas, así que vamos a repasar algunas directrices para maximizar las posibilidades de éxito de nuestro proyecto.
En primer lugar, debemos ser conscientes de lo que busca el mercado. Nuestra idea puede ser magnífica pero anticuada, o simplemente inalcanzable. Fabricar un producto que está en vías de extinción, como una máquina de escribir, obviamente es una mala idea, pero nuestra imaginación tiene que avanzar un peldaño más y descubrir cuáles serán esos productos en los próximos diez años. No queremos ser los fabricantes de un producto que no exista en 2020.
Cualquier proyecto relacionado con el comercio online y con internet tiene un atractivo extra. En un mundo globalizado la crisis es relativa y los españoles podemos hacer negocios con los países hispanoamericanos. En internet la única frontera es el idioma, aprovecha la oportunidad e investiga ese filón. En caso de que tu proyecto empresarial vaya por otro camino, no olvides darle la relevancia adecuada en las redes sociales y optimizarlo al máximo para que se hable de él en la red.
Una de las formas de averiguar si estamos listos para hacer frente al siempre exigente mercado es el certificado ER de emprendedor, que contiene las 35 preguntas básicas que todo emprendedor debe saber responder con solvencia. Pero de él te hablaremos mañana.